Consumo & Retail

La publicidad y comunicación de marca y su relación con el consumidor

La publicidad y comunicación de marca es un factor con el que convivimos 24/7. Pareciera así que hay una apuesta contra reloj de ganar espacio en la mente y corazón del consumidor, con herramientas como la publicidad emocional que está en plena tendencia

Con tantos estímulos, es una proeza llegar realmente al objetivo, pero ¿qué pasa en ese momento cuando se logra?

En el  2017 tuve la oportunidad de estar en contacto con marcas muy diversas, donde pude observar una constante que me lleva a contestar esta pregunta.

Love Mark

Cuando se llegan a mover los sentimientos del consumidor, se está impactando de tal forma que se establece una relación más allá de una marca “favorita” o una “love mark”.

Se llega a niveles tan profundos en los que se asume a la marca como alguien parte de su vida, sintiéndola como una persona de su propio mundo, pensando en éstas como si fueran un amigo, un familiar o algún personaje de su vida diaria. Lo anterior  genera un acercamiento a niveles insospechados.

Cambia completamente la interacción y también la demanda de atención del consumidor para la marca, lo que implica que puede sentir un amor genuino o el más fuerte odio.

Los sentimientos siempre se potencializan y vuelven más complejos si hablamos de personas que de cosas.

El caso de Netflix es uno muy representativo. La gente lo ve como aquel amigo que te acompaña cuando por ejemplo quieres tener un rato de distracción. Se ha vuelto en la mente del consumidor no solo la imagen de una persona con características físicas y de personalidad. Ya se le asigna un lugar dentro de la configuración de personas queridas.

Es por esto que es muy importante el cuidado que se le dé a esta relación.  Si el consumidor no recibe reciprocidad ante la importancia que él le da a la marca, los efectos pueden ser muy negativos. La dificultad aumenta cuando ni siquiera la marca conoce que tiene éste lugar en la configuración personal de sus clientes e incluso por desconocimiento no poder responder al nivel adecuado.

Y tú ¿sabes si tus consumidores te ven como un amigo, como un primo o como un tío? ¿Sabrías como corresponder ante este afecto de la manera correcta?